“El ser y el deber ser del enfoque por competencias en la educación básica”
Luis Fernando Torres Palomo.
Con apego en las tendencias actuales y en la búsqueda de que los Sistemas Educativos cumplan con el cometido de formar ciudadanos cada vez mejor preparados y en mejores posibilidades de participar de forma activa y propositiva en la sociedad y el campo laboral, se pretende ofrecer un servicio de calidad que desarrolle en ello competencias. Una educación de calidad debe favorece en los alumnos competencias para la vida; con una reconceptualización que educar significa dar a las personas la oportunidad de desarrollar su potencial, su personalidad y sus talentos y aptitudes particulares. De ésta manera, no se trata simplemente de que el educando adquiera nuevos conocimientos, sino también de que desarrolle capacidades que le permitan vivir una vida más plena y que así sea para más personas.
Esto es lo que se entiende como preparación para la vida diaria y comprender las capasidades intrínsecas de las personas (su esencia y su naturaleza) y las competencias prácticas necesarias para la vida diaria. Muchas de las capacidades intrinsecas no pueden enseñarce como si fueran asignaturas, pero se tiene la posibilidad y la necesidad que deben modelarce y fomentarce como parte del aprendizaje, en particular por parte de los docentes[1]. Las competencias tienen que ver con la forma en que nos comportamos hacia los demás, hacia nosotros mismos, hacia las tareas y los problemas de la vida en situaciones diversas, y que exigen de nosostros una acción que debemos hacer con base en nuestras competencias.
Entre éstas competencias figuran la de Comunicación, Toma de deciciones, Solución de problemas, Negociación y afirmación personal, Pensamiento crítico y Comprención y control de las emociones propias. La necesidad de desarrollar nuestras competencias prácticas se impone en cada etapa de la vida, de manera que su aprendizaje puede formar parte de la educación de la primera infancia, la enseñanza primaria y secundaria, o la formación de adultos. En mi opinión no se puede hablar de competencias terminadas sino que se desarrollan y modifican mediante su puesta en práctica y la constante preparación; en base a esto me permito plantear una cuestión: ¿las competencias tienen caducidad? ¿Es posible que algunas competencias puedan dejar de ser funcionales dependiendo de las demandas y condiciones sociales en futuros tiempos y contextos?
El Informe a la UNESCO de la Comisión Internacional sobre la Educación para el Siglo XXI postula la existencia de cuatro pilares, que corresponden a determinados tipos de competencias prácticas para la vida diaria: Aprender a conocer (contenidos conceptuales: Se refiere a contenidos de tipo académico / informativos. El conocimiento y comprensión de hechos, conceptos, términos) relativo al desarrollo de capacidades intelectuales, como saber solucionar problemas, ejercer un pensamiento crítico, tomar decisiones y comprender sus consecuencias, Aprender a hacer (contenidos procedimentales: Se refiere a contenido de tipo académico / prácticos. Poner en práctica los conocimientos. Resolución de problemas, aplicación de estrategias y procedimientos) destrezas manuales, como las competencias prácticas necesarias para desempeñar un trabajo o llevar a cabo determinadas tareas, Aprender a ser (contenidos actitudinales: Tiene un carácter formativo-personal. Se refiere a cuestiones como conocerse, desarrollo de la autoestima. Actuar en congruencia con valores personales, denotándolo en cuestiones como respeto a sí mismo, cumplir compromisos propios, desarrollar su creatividad) Capacidades personales, como el manejo del estrés y las emociones, la conciencia de sí mismo y la autoestima, Aprender a vivir con los demás habilidades sociales, tales como la comunicación, la negociación, la autoafirmación, la capacidad de trabajar en equipo y la empatía. La práctica constante de valores permitirá establecer mejores beneficios, para el logro de objetivos comunes y para que la convivencia sea plena; regir conductas con ética, independientemente de la profesión que se desempeñe, puede ayudar a cada persona a responsabilizarse de lo que hace y a hacerlo bien, mediante la corresponsabilidad podemos hacer que las sociedades funciones de mejor manera, de una manera humana.
En el mundo de hoy todas estas capacidades son necesarias para hacer frente a las rápidas transformaciones sociales. Esto implica que es importante saber cómo seguir aprendiendo, en la medida en que necesitamos nuevas habilidades para la vida y el trabajo. Además, necesitamos saber cómo afrontar el gran volumen de información existente y convertirlo en conocimiento “útil”. Asimismo, necesitamos conocer la manera de enfrentar los cambios, tanto en la sociedad como en nuestras propias vidas, sobre todo en situaciones que no dependen de nosotros.
Las competencias que se han identificado para los niveles de Preescolar, Primaria y Secundaria de acuerdo a los programas educativos: Preescolar Con la finalidad de identificar, atender y dar seguimiento a los distintos procesos del desarrollo y aprendizaje infantil, y contribuir a la organización del trabajo docente, las competencias a favorecer en los niños se han agrupado en seis campos formativos: desarrollo personal y social, lenguaje y comunicación, pensamiento matemático, exploración y conocimiento del mundo, expresión y apreciación artística y desarrollo físico y salud. Cada campo se organiza en dos o más aspectos, en cada uno de los cuales se especifican las competencias a promover en las niñas y los niños. En el nivel de Primaria se trabaja en base a ejes curriculares con sus respectivas competencias, comprensión de medio social y cultural, comunicación, lógica matemática, actitudes y valores para la convivencia y aprender a aprender. En el nivel de Secundaria para los alumnos se han planteado las competencias para la vida: para el aprendizaje permanente, para el manejo de lo información, para el manejo se situaciones, para la convivencia y para la vida en sociedad.
[1] Aun que hemos visto que es una tarea compartida entre docentes, directivos, padres de familia y sociedad, si es tarea del docentes organizar este colectivo para tal fin y echar a andar este engranaje.
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